¿Cómo te ves a ti misma?, ¿sientes que tienes confianza en ti?
Con la autoconfianza te sientes preparada para vivir el día a día con la seguridad suficiente para hacer frente a cualquier tipo de situación, para aprender y experimentar.
Si confías en ti misma, avanzas, no te paralizas ni huyes antes las dificultades porque crees que no eres capaz de afrontarlas. Igualmente, sabes lidiar con la cotidianidad, con los cambios (favorables o no), o las incertidumbres.
Cuando confías en ti misma, te muestras segura, te relacionas más fácilmente con tu familia y demás personas, y eres consciente de que no eres perfecta, que cometes errores, y te esfuerzas en mejorar. En cambio, cuando tu autoconfianza está fallando, te subestimas, limitas y conformas.
Como podrás imaginar, la autoconfianza se crea en la niñez. Es durante esa etapa que vamos creando una imagen de nosotros mismos, según las vivencias que vayamos teniendo, nuestras relaciones con otras personas y el entorno donde nos desenvolvamos.
Claves para construir autoconfianza
Lo primero que deber hacer para construir autoconfianza es estar dispuesta a conocerte a ti misma. Al hacer una reflexión sobre la imagen que tienes de ti, tu forma de ser, tus deseos, tus motivaciones y tus expectativas en la vida, le das valor a cada aspecto de tu personalidad y tomas conciencia de lo que quieres desarrollar y mejorar en ti.
En el proceso de cultivar autoconfianza es vital:
- No compararte con los demás, cada persona es única y tiene su propio ritmo de progreso y superación.
- Ser agradecida con lo que tienes y has logrado, y por tener la oportunidad de continuar teniendo experiencias y aprendizajes
- Ser consciente de tus inseguridades, imperfecciones y de los errores que cometes, y al mismo tiempo saber que cada situación que tengas que afrontar es una oportunidad para mejorar y fortalecerte.
Qué hacer para cultivarla
Para cultivar la confianza en ti misma, puedes seguir los siguientes consejos:
- Recordarte cuáles son tus cualidades y capacidades y elogiar lo que has hecho y logrado en tu vida.
- De la misma forma que elogias lo bueno que has obtenido, acepta lo no tan bueno que te haya ocurrido. Toma cada experiencia negativa y cada error como un aprendizaje.
- Intenta mantener una actitud positiva y optimista ante la vida, aleja de ti los pensamientos negativos. No es nada fácil de lograr, lo sabemos, pero esfuérzate para que sean más los días en que te valores y te sientas segura de tus capacidades y de que lograrás lo que te propongas.
- Atrévete, no solo sueñes, hazlo, construye, actúa. Si logras tus objetivos te sentirás satisfecha y feliz y mejorará tu autoconfianza. Si las cosas no salen según lo planeado, te corresponde aceptarlo y seguir adelante, ahora con más experiencia, y valorando el esfuerzo que hiciste.
- Acepta los elogios de otras personas, no los rechaces, recíbelos y sé agradecida.
- Aléjate del perfeccionismo porque no tendrás paz contigo misma ni tampoco con los demás.
Igualmente, las personas con verdadera confianza en sí mismas:
- No necesitan que otros les digan lo buenas que son ni lo bien que lo están haciendo para sentirse satisfechas. Están conscientes de cómo son y lo que hacen, y se sienten contentas con sus logros.
- No juzgan a los demás, no se comparan con otras personas en ningún sentido, ni para creerse mejor ni peor.
- Saben escuchar y saben cuándo decir sí y decir no con seguridad y sinceridad.
- Son personas que cuidan de sí mismas, de su alimentación y su condición física.
- No andan por ahí pretendiendo ser lo que no son ni queriendo llamar la atención.
- Hacen sin temor a cometer errores.
- Son generosas con otras personas, saben reconocer sus capacidades y aciertos, y saben cuándo elogiarlas sin mezquindades ni envidia.
Peligros de la autoconfianza
La autoconfianza entraña peligros si es falsa, si supone un autoengaño, si es una máscara que pretende proyectar una imagen de ti misma que no es real. Evita proyectar más seguridad de la que realmente tienes porque podrías caer en la autosuficiencia y prepotencia.
Por otro lado, si tu autoconfianza es excesiva, lo cual también podría ocultar tus inseguridades, podrías llegar a sentirte infalible y que no necesitas escuchar ni tolerar las opiniones y conductas de otras personas. Con ello, tus relaciones podrían volverse difíciles.
Cultivar la confianza en los niños
Tienes a tu alcance herramientas para ayudar a cultivar autoconfianza en tu hijo. Una de estas herramientas es la palabra.
Usa el poder de las palabras para contribuir a que tu hijo adquiera confianza en sí mismo y fortalezca su autoestima.
Trata de usar palabras y frases que lo alienten a seguir intentando hacer las cosas, a probar lo diferente, a expresar sus sentimientos, a entender el riesgo y peligro de ciertas conductas, y a reconocer su esfuerzo y logros.
Otros consejos que puedes poner en práctica son:
- Asígnale retos que sea capaz de hacer de acuerdo con sus habilidades y capacidades.
- Muestra una actitud de confianza hacia el niño, que sienta que crees en él.
- No intervengas en sus problemas cotidianos, a menos que sea una situación peligrosa y complicada con la que tu hijo no pueda lidiar solo. Anímalo y guíalo para que encuentre soluciones por sí mismo.
- Estimúlalo para que sea autónomo en las actividades cotidianas, siempre de acuerdo con lo que sea capaz de hacer según su edad y desarrollo.
- Cuando se equivoque, oriéntalo para que descubra cuál fue su error y cómo puede mejorar.
- Dale el ejemplo, muéstrate y actúa con confianza en ti misma.
