La Programación Neurolingüística (PNL) es una de las herramientas que pueden ayudarte a acompañar el crecimiento y desarrollo de tu hijo. Seguramente, has oído hablar de PNL para niños, pero no sabes en qué consiste ni cómo puedes aplicarla. Lo verás a continuación.
La PNL se basa en el poder de la palabra. Consiste en un conjunto de estrategias y técnicas basadas en el lenguaje en las que te puedes apoyar para la educación de tu niño, para mejorar su conducta, y acompañarlo en la construcción de su autoestima, seguridad y confianza.
Dos de los elementos de la PNL para niños que siempre debes tener presente, son:
- Las palabras construyen pensamientos e influyen en el modelaje de la personalidad del niño.
- El foco de esas palabras debe estar en los aspectos positivos, las fortalezas y virtudes de tu hijo.
En suma, cuida las palabras porque tienen el poder de influir en el desarrollo de la personalidad y en el comportamiento de tu hijo.
Además, es esencial que siempre valores a tu hijo y lo tomes en cuenta para todo. Ve siempre a tu hijo como una persona capaz de entender y hacer cosas, como alguien que tiene una opinión válida. Si consideras lo contrario, sin duda que tu hijo lo percibirá y comenzará a verse a sí mismo de la forma negativa como tú lo estás viendo.
Sistemas de representaciones en PNL
Otro de los aspectos que debes conocer de la PNL es que se basa en que cada persona construye diferentes representaciones de la realidad. Es decir, las personas percibimos la realidad y procesamos la información proveniente de esa realidad de manera distinta. La representación de la realidad que construimos está influida por nuestras emociones y procesos del lenguaje.
Desde la perspectiva de la PNL existen tres sistemas de representaciones:
- Visual: las personas perciben la realidad, predominantemente, observando y recordando imágenes, y construyendo pensamientos en forma de imágenes.
- Auditivo: en la percepción de la realidad predomina el uso del sentido del oído. Las personas procesan y recuerdan mejor la información que perciben en forma de palabras y sonidos.
- Kinestésico: en la percepción y procesamiento de la realidad predominan las sensaciones provenientes de la interacción física. Las sensaciones que influyen en la construcción de la realidad son táctiles, gustativas, olfativas.
Ten en cuenta que estos sistemas de representación son una manera predominante de percibir y procesar la información. No quiere decir que una persona use solo la vista o el oído, emplea todos los sentidos, solo que tiene un sistema de representación preferente.
Conocer cómo funcionan los sistemas de representación es especialmente importante en la aplicación de la PNL para niños en el aprendizaje y mejoramiento de la conducta.
La razón es que si comprendemos el sistema de representación que utiliza el niño, podremos adaptar los métodos de enseñanza y lograr una comunicación más eficiente y fluida.
¿Cuáles son los beneficios que aporta la PNL para niños?
- Un aprendizaje más eficiente y con más posibilidades por la inclusión de estrategias y métodos adaptados al sistema de representación del niño.
- Una mejor gestión de las emociones porque las estrategias de PNL ayudan al niño a manejar situaciones estresantes y conflictivas. De esta manera asimila y supera los momentos no tan buenos que se le puedan presentar en la escuela, en casa, o con amigos.
- Mejora la autoestima del niño, sus relaciones con los demás y fomenta el desarrollo de las actitudes positivas.
Estrategias de PNL para niños
Ahora te preguntarás qué puedes hacer para emplear la PNL con tu hijo. Existen estrategias de Programación Neurolingüística que han sido utilizadas con éxito, te mostraremos algunas de ellas.
Lenguaje asertivo o afirmaciones positivas:
Intenta comunicarte con tu hijo construyendo frases afirmativas, claras y concretas, a fin de proyectar el estado físico, mental o emocional que quieres que logre.
Por ejemplo, en lugar de decirle “eres un vago, vas a reprobar el examen”, dile “si estudias y te esfuerzas, lograrás buenos resultados en el examen”.
El anclaje:
Es un ejercicio que como su nombre lo indica busca anclar un estímulo externo a un estado emocional positivo que desees que tu hijo adquiera.
Un estímulo externo o ancla puede ser una palabra, un color, un gesto, un olor, un sabor que puedan asociarse a un estado de seguridad, tranquilidad o alegría cada vez que sea necesario. Es decir, cada vez que el ancla se repita, el niño se situará en ese estado emocional en el que quieres que esté.
Con los niños hay que utilizar anclajes sencillos y que puedan tener a disposición, tales como objetos que puedan llevar consigo para sentirse más confiados al momento de presentar un examen, por ejemplo.
Antes, deberás hacer con el niño el ejercicio de dibujar un círculo y hacerlo evocar momentos felices, donde se ha sentido seguro y con confianza.
Pídele que cree un objeto (un dibujo, por ejemplo) o que tome alguno ya existente (un lápiz, por ejemplo), y lo coloque dentro del círculo. De esta forma, el objeto se convertirá en el ancla. Procura tener varios objetos como anclas para que no haya problemas en caso de que alguno se pierda.
Igualmente, aprovecha un momento de alegría de tu hijo, cuando se está divirtiendo y riendo a carcajadas, por ejemplo, para asociar un anclaje táctil (tocarle el hombro), auditivo (una palabra que defina ese momento) o visual (mostrarle un objeto). Esta es una de las maneras de lograr que un estado de bienestar quede anclado a un estímulo externo al que el niño pueda recurrir.
Calibración:
En esta estrategia es fundamental ser un buen observador para reconocer el estado emocional en el que se encuentra tu hijo a través de su comportamiento verbal y no verbal. Conociéndolo más, si eres capaz de identificar sus emociones aunque esté ocultándolas, podrás comunicarte mejor con tu hijo y ayudarlo a superar momentos de dificultad.
Hipnopedia:
Uno de los recursos que utiliza la PNL para niños es la hipnopedia, mediante la cual se aprovechan las horas de sueño del niño para hablarle a su mente inconsciente, ayudándolo a mejorar conductas y la gestión de sus emociones.